Todos sabemos que la tecnología está en todas partes y cómo ha afectado al turismo en los últimos años. 

Usamos los CRM y los sistemas de reserva; todos conocemos a Booking.com, Expedia, TripAdvisor y las redes sociales. 

Algunos utilizan conserjes virtuales y todas las herramientas de automatización que pueden encontrar en el mercado para adaptarse a situaciones de escasez de mano de obra. Al margen de que estas herramientas seguirán evolucionando, ya hay muchas más en el mercado que están creando nuevos paradigmas en la industria del turismo, como la Inteligencia Artificial. ¿Escalofriante? 

Tal vez. ¿Oportunidades? Por supuesto. Si bien la tecnología nos permite navegar por un sinfín de contenidos, jugar a millones de juegos y visitar nuevos mundos, reales o irreales, lo que fomenta los hábitos sedentarios, también proporciona nuevas formas de generar luz y vida a sus instalaciones. He aquí algunos ejemplos. 

Creando nuevas experiencias: 

Cada vez más, los recintos y eventos combinan la tecnología y el diseño artístico para mejorar el atractivo de su emplazamiento de una forma mucho más sofisticada que la simple instalación de algunas luces LED en sus edificios. Es el momento de apelar a los sentidos: iluminación sofisticada para hoteles, audio 'ambisónico' para spas, difusión de olores a medida para restaurantes y boutiques, experiencias interactivas para sorprender a los visitantes, realidad virtual, videomapping, realidad aumentada y realidad mixta, etc. Todo ello crea experiencias in situ que harán que los visitantes vuelvan a las atracciones turísticas con acceso a experiencias más diversificadas y contenidos más ricos. Además, la experiencia de los visitantes es cada vez más personalizada gracias a las últimas capacidades e innovaciones geoespaciales. Diversas tecnologías permiten ahora afinar la posición de una persona en una multitud o en una atracción turística. Esto ofrece varias ventajas, como proporcionar a los visitantes un acceso inmediato a la información pertinente en su dispositivo móvil o, mejor aún, permitirles influir en lo que está ocurriendo y, por tanto, 'co-crear' y personalizar con precisión su experiencia. Por lo tanto, en lugar de luchar contra la tendencia de los visitantes a utilizar sus teléfonos móviles, puede aprovecharla para crear una experiencia que les atraiga hacia su producto. De visitantes o espectadores, pasarán a ser usuarios, interactores e incluso fans.  

Un ejemplo: Immersion Quebec, un centro de interpretación que combina la realidad virtual, las interacciones y los juegos para presentar contenidos históricos y turísticos.

¿Eventos híbridos? ¿Es necesario?  

Hay que esforzarse por crear eventos híbridos (o co-modales) que merezcan la pena. Uno puede plantearse: ¡Para! ¿Por qué trabajar en ese campo cuando prefiero tener a todos mis clientes en mi local? Dos razones: en primer lugar, la pandemia nos obligó a reunirnos virtualmente. Aunque el fenómeno de la fatiga del Zoom existe, la tecnología ha llegado para quedarse. Los organizadores de eventos y sus clientes tienen ahora la posibilidad de ofrecer reuniones virtuales con funciones innovadoras. Sin embargo, la gente sigue queriendo y necesitando reunirse en persona, especialmente en el ámbito de Skål International. La segunda razón: la evolución del mercado. Supongamos que puede ofrecer una experiencia que combine el acceso a eventos en directo con opciones interesantes para los participantes virtuales. En ese caso, tendrá acceso a un mercado que crecerá un 25% al año durante los próximos cinco años, según un estudio mundial dirigido por  Reports IntellectPuede que su habitual evento de 500 asistentes baje a 350 durante un tiempo, pero puede tener 1000 participantes virtuales más de todo el mundo. Tanto los asistentes presenciales como los remotos tienen un mayor índice de compromiso porque la tecnología ofrece opciones como las preguntas y respuestas, los stands virtuales, las reuniones individuales, el acceso a contenidos multimedia, la coincidencia de intereses, etc. Y cuando todo está bien hecho, los asistentes virtuales pueden desear estar presentes en persona en el siguiente evento. Espere, hay más: el híbrido también se aplica a los eventos deportivos, los conciertos, los teatros: se puede ofrecer una experiencia adaptada a los que están viendo el espectáculo cómodamente en pijama en su sofá, pero el Sports Innovation Lab afirma que en el ámbito deportivo, la innovación está por nacer donde el 'ir', 'ver' y 'jugar' se saludan. Cientos de empresas tecnológicas están desarrollando centros experienciales que ofrecerán nuevas posibilidades de interacción con los deportes, los conciertos o los espectáculos que te gustan, con aficionados de todo el mundo deseosos de viajar.

Ejemplo de plataforma virtual:  Connexion.tv

Ejemplo de plataforma experiencial: SkyShow

El elefante en la habitación: La Inteligencia Artificial (IA)

Tendemos a imaginar escenarios de terror cuando nos enfrentamos a lo desconocido. Esta es una de las razones por las que somos tan cautelosos con la Inteligencia Artificial (IA). ¿Cuál es el fondo de todo esto? La IA no es una inteligencia real, sino sistemas informáticos que ejecutan tareas que, de otro modo, podría realizar la inteligencia humana, como el reconocimiento visual y del habla, el análisis de datos para la toma de decisiones o las previsiones meteorológicas. Sin embargo, la tarea que atribuimos al software de IA es el único propósito de las acciones de los ordenadores. Es posible que ya esté utilizando chatbots en sus sitios web o como conserje virtual. Puede que no sean lo suficientemente convincentes, pero pronto lo serán. Serán capaces de anticipar los hábitos de los visitantes en la red, la duración de la estancia, el gasto, lo que les gusta y lo que no les gusta. Utilizaremos la IA para crear entretenimiento de formas que ni siquiera imaginamos ahora. Un amplio abanico de empresas se ha unido a la nueva red mundial  Entertain AI, dedicada a crear estas nuevas posibilidades.

En conclusion: 

Hay mucho más que decir sobre cómo la tecnología marcará el futuro del turismo. El desarrollo ecológico, por ejemplo, es un aspecto vital que debe abordarse mediante herramientas tecnológicas. Una certeza: si la tecnología existe, se utilizará. 

Depende de nuestro sector domarla y aplicarla de una manera responsable que tenga sentido para que nuestras respectivas organizaciones adapten nuestros productos a un mundo en constante evolución. Es un reto y un estrés, pero también es emocionante y prometedor.